Una lectura de Roma
Por Mauricio Castaño H
Colombiakritca


Roma con su figura de la loba nos hace a todos mamadores de la violencia, hijos del asesinato sacrificial
El horror, el asesinato es la develación de la fundación de Roma. Y más allá o a la par, están las ciencias duras y blandas que dan cuenta del objeto hecho abstracción pero que convalida una lógica de la muerte a decir de Michel Serres. Son tres ciudades que develan a la gran civilización humana. Atenas nos dió la palabra, la abstracción. Jerusalén es el símbolo por interpretar. Roma es la concreción, es la piedra, la escultura. Presentamos al hombre que habla, que filosofa pero también está quien se expresa con las manos en la concreción del pensamiento, es la Roma con sus esculturas. Jerusalén tiene el símbolo que está ahí para ser interpretado. Se ha de saber que los reyes provienen del bosque, son reyes silvestres, incluso mejor llamarles salvajes. Mientras que la ciudad es política, es civilizada como Roma con sus muros que pretender resguardar la paz.. Historia de la civilización y prehistoria del salvajismo, en dos palabras arqueología del saber. Todo esto es de Michel Serres en su libro Roma. Allí se tiene que el motor de la historia es la violencia. Presentamos algunos párrafos, un collage. Es una lectura, una invitación a leer el libro de Roma de Serres.


Se dice que el idealismo le tiene horror a la encarnación. El gesto que se materializa con la mano que lo ejecuta es ignorado por el que está embriagado en la sóla abstracción, quien está de espaldas al mundo. Todo verbo se hace carne, todo signo representa un real. "Atenas y Jerusalén escriben, hablan, piensan, desde que entorno al mar Mediterráneo alguien pensó, habló o escribió." (53) " Los bárbaros demuelen el edificio para volver la piedra así función proyectil, la sabiduría construyen para inmovilizar la piedra, para apaciguar el odio, para la protección, para poder dormir tranquilos… lo esencial es que los proyectiles se inmovilizan. El plano del constructor no cuenta aquí, el ideal arquitectónico no está más que para la representación. Construir no es más simbolizar para la paz." (53). Atenas y Jerusalén son faros, Roma es un horno. (55). No sé busca más que lo que está oculto. El desconocimiento bien organizado recubre el conocimiento. (57)


Es una nueva forma de escribir la historia. Son fuentes las huellas de pisadas dejadas por hombres y animales que orientan o despistan según sea la habilidad de uno y otro que juegan como a escondidas. Todo aquello que atice el fuego del odio, de la muerte funda al poder. No es extraño el asesinato si todos los hijos de Roma han mamado de la teta de la loba, se han alimentado de la venganza sacrificial. Rómulo mata a Remo y funda a Roma. Cada función está precedida de un asesinato. "Los dioses pasan delante de los reyes. Un héroe se vuelve Dios en los lugares en los que el gemelo se vuelve rey. Hércules sube al altar, Rómulo al trono. Rómulo mató a Remo. Hércules mató a Caco. Rómulo arriesgó su vida en la batalla de su muerte, en medio de la turba. Hércules arriesgó su vida en la muchedumbre de los pastores de la vecindad, que vinieron todos a socorrer a Caco. Hércules fue reconocido como dios. Hijo de dios por Evandro. Rómulo busca el reconocimiento, busca una legitimidad." (9) 


Acá otra novedad en Serres, toma por fuente la leyenda: "la leyenda interviene en medio del relato legendario por cambio de lengua, por cambio de registro, de tono, por cambio de escala, de estado, de espacio y de tiempo, se diría una metalengua. Una leyenda, en el sentido de los mapas, está siempre escrita en una metalengua. Lo que está escrito en latín está, quizá, latente: oculto, codificado, por descifrar… ¿Y si lo que fue puesto en griego estuviese claro? ¿Y si la leyenda griega iluminador la sombra latina? ¿Y si la historia, difícil, encontrase allí su filosofía? Sí, leyenda quiere decir claramente: cómo leer lo que hay que leer." (P. 10)


El rey y el sacerdote son las dos caras del soberano.


"La filosofía de la razón recta, de la deducción, de lo universal, la filosofía antigua y clásica sólo servía al rey. El rey y el sacerdote son las dos caras del soberano. La filosofía del combate, de la lucha, y del trabajo negativo, no sirve más que al soldado, al militar, al militante, que pasa por la muerte para cumplir la obra de la historia. La filosofía de la sospecha, del intérprete y del fragmento, del polvo y de la lupa, es aquella del espía, del detective, del inspector, del policía, del horror. Las fichas están allí, escritas, a disposición del brazo secular, de cualquier lado que se caiga. No hacemos más que historia, no escribimos más que interpretaciones, no somos más que policías. Horror. No hacemos más que buscar culpables." (P.17)


"Las ciudades antiguas están diseminadas, no marcadas sobre los bordes del mar Mediterráneo. Una sola ley, ellas entre luchan. Una sola ley de orden, el odio. Una sola regla de atracción, la matanza. Destrucción, absorción. Roma arrasa a Alba. Ella lleva toda una población en sus muros. Sabe también pasar por el filo de la espada la totalidad de los vencidos. La geografía de la siembra, es el dato democriteano, la nube que no cesará." (P. 4).


La ley del termitero se cumple en el poblamiento humano, allá se eligió un territorio y todos van y asientan su hábitat, en los humanos es igual. Son redes que previamente avizoran el espacio a poblar por sus llanuras, relieve, sus afluentes de agua, sus climas. Por allí, por la red, lo más posible, pasarán los intercambios necesarios para la vida. Una diferencia, en la civilización humana "La economía es la continuación de la guerra por otros medios. En la red global o en la distribución del conjunto de las ciudades se puede leer sucesivamente las subregiones de las grandes y de las supergigantes." (5)


"Una bola se amplía y a eso se llama guerra o conquista, asesinato simple, matanza colectiva, sancionada, santificada por los textos de la historia, la bola absorbe a su vecina y esos agrandamientos fluctúan por el tiempo. He aquí la nube de pequeñas ciudades y la subnube de las ciudades que fabrican un imperio, y la subnube de las grandes confederaciones de la vida rápida o larga, vez el paralelo con lo que yo nombraba díada, tríada, tetradía, y así como se quiera, pentadía. La atracción, la potencia varían con el volumen. Está potencia es claramente una capacidad de atraer, de absorber, sí, de subsumir lo múltiple. La tierra conocida de nosotros es un cielo constelado de bolas, enanas, medianas, grandes, súper gigantes, en un semillero tenue de pequeños pueblitos. Las fluctuaciones de ese campo hacen el tiempo de la historia. Se diría, la historia del cielo. " (5)


"El mito comprende a la historia, ninguna historia explica el mito. La historia es una serie analítica salida, como los bueyes, de la caja negra (cueva) de elementos blancos (personajes que hacen pisadas, gritan… como en la fábula que anexamos. Blanco es la suma de los colores, se descompone por el espectro del arco iris… tu eres animal, pastor, rey y dios, tu eres blanco; tu eres bueno y malo, ladrón y robado, asesino y asesinado, tu eres víctima, sustituto y sustituído.).... (30) Ofrecemos sacrificios sobre el mismo altar a Júpiter (teología), a Marte (violencia), a Quirunos (economía).


La plata y el oro, el papel moneda son equivalentes generales. Una suma, una suma de dinero es un elemento blanco. Usted puede con ella obtener un todo." (P.28)


Lo Sagrado tiene una estética de la Matanza


Mezcla de la violencia y lo sagrado



"Antes de pensar el tiempo busquemos pensar los lugares. La investigación del origen cubre los lugares como los bueyes recubren el campo con sus huellas. Hemos leído los lugares de las ciudades sembradas en torno del mar. ¿Pasa el origen por todas las ciudades, cada una de ellas es originaria?  Aquí los lugares de la guerra total parecen coincidir con los lugares de los dioses. Las imágenes repetidas de Eneas con Atenor, de Amulius con Numitor, de Rómulo y de Remo, de Horacio y Curiáceo, imágenes simétricas de rivales monótonos, son transportadas por el resplandor que viene del incendio de Troya, por la luz venida del Olimpo, es decir de un foco dónde se mezclan la violencia y lo sagrado." (P. 34)


El conocimiento encubierto, descodificación o desciframiento.


El conocimiento, en todos los lugares y en todos los tiempos, se mezcla con desconocimiento, está sin cesar acompañado de él. Es el espectro fino de luz y de sombra o de claro-oscuro, sino no habría historia. Por muy puro que sea el fuego de Vesta deja cenizas a medida que arde. (62)... El saber no es tampoco quizás tan amplio como se cree, a la vista de éstas sombras.  (63)


Roma muestra aquí lo inverso de nuestros usos de razón. Ella nos muestra, ocultándola, una práctica ciega de la implicación. Se conduce como si supiese, en el origen o desde todos los tiempos, que nuestro tiempo o nuestra ciencia, indefinidamente, explica, explota, analiza, separa, excluye, como si ella supiese que era necesario primero preparar el plegado y el recubrimiento. No descubriréis  más que aquello que hemos recubierto antes de vosotros. Desenterrando y ella entierra, nosotros abrimos las tumbas, ella las cierra, ella borra las huellas. Roma es la ciudad de las tumbas.


El conocimiento es mezcla, pliegues como lo hace el panadero una, dos veces, diez veces, veinte… o como Arlequín que quita capa tras capa casi hasta el infinito. Por el contrario... " nosotros, simples ciegos, simplistas o de corta vista, no hemos sabido lo que es un tejido… nosotros lo hemos alineado sobre las series analíticas. Nunca hemos morado ese trayecto… (68) siempre se puede encontrar una aguja en un pajar, "mi esperanza está en lo inesperado, ¿Qué puede esperar de la ejecución melancólica de las leyes? (70)


Palabras


Ignos es, en griego, la marca del paso, la huella del pie. Ignografía marca todos los sentidos de una escenografía, un perfil visto desde un cierto sitio… la historia va a derivar de allí mejor que de una fuente. La caja negra ( como la cueva) es la ignografía misma.


El libro de la fundación es ante todo ignográfico. Está escrito en negro, está escrito en blanco. Todo está escrito sobre la página de la leyenda, nada está escrito sobre la página de Alba. Todo lo posible está allí virtual, implicado. He acá el pozo, lleno, he acá lo blanco, virgen. Tito Livio, en el origen, describe los operadores más simples, una jarra negra, llena, cerrada, y una jarra blanca, abierta, vacía.


Aguas. Todas las aguas del mundo son aguas de recolección, vienen ya de más alto… lo indeterminado no tiene ningún sentido, los tiene todos. 39


Roma. Roma en griego, quiere decir la fuerza. Alba precede a Roma y Roma destruye a Alba. Antes de la decisión está la indecisión, y la fuerza codifica lo blanco (registros). He aquí un origen. La fuerza determina lo indeterminado primero. Lo codifica. Ella lo codifica en latín. Lo oculta, lo hace latente… ¿Qué es escribir una historia? Tito Livio responde: es codificar un espacio un espacio blanco indeterminado, es determinarlo por la fuerza. Y por tanto ocultarlo. (P.40)


Dispersión, Huída, Fragmentos, fragor


La dispersión produce los concursos, la huída produce los encuentros. Las piedras separan, los nombres propios reúnen. La separación en todos los sentidos produce conjuntos. Como si las piedras se hiciesen signos, se hiciesen llamados, se hiciesen nombres propios. Pedro, Petrus, piedra, sobre la piedra se edifica, en torno a Petrus se hace grupo. El grupo existe por el objeto, se reúne a su alrededor del objeto o cuasi objeto, de algún virtual que lo conmemora.


La muchedumbre huyendo hace ruido, fragor. Huye en fragmentos dispersos. Esos pedazos fracturados, esas piedras hacen ruido, producen un llamado, fragor, producen una aclamación. Allí estamos aún. Pero no es necesario tomar el uso de escuchar también. La turba se precipita en tropel, ella hace ruido. Ella se reúne, ella se aclama. (76)


Las abejas vuelan y ellas rodean a la reina, los migrantes están en una especie de espacio rodante, flotan como un estandarte al viento. Este conjunto está en orden pero orden fluctuante por un trabajo y por una dispersión. (78)


Sufragio


El debate del saber humano y social contra las religiones fue, por el contrario, fue abierto e histórico. Y él no ha acabado totalmente. Quizá comenzó con los presocráticos, y perdura hasta nuestros días. Es mucho menos claro y definido que el primero. La simetría de las cuestiones cesa, pero ella nos instruye. Cuando yo trato de pensar el sufragio, cuando busco el paralelo con la noción de sustancia, permito ver la relación antigua, fundadora, presente aquí aún y ahora, la relación de nuestra práctica y de nuestro saber positivo con las prácticas y los saberes más antiguos de nuestra historia. La gran escena del sufragio por medio de las cosas, signos y sonidos, por el mundo, cuerpo y aclamación, es la muerte del rey Rómulo, la gran escena del sufragio es la lapidación de la vestal Tarpeia, la gran escena del sufragio es la síntesis de las dos escenas. Latido trágico, en un tiempo fundamental, dónde los pedazos parten de un cuerpo y vuelven a él, transubstanciados en piedras, antes de serlo en signos, en medio de los clamores y de las voces. El sufragio atraviesa la historia de las religiones, el espesor pesado y lento de nuestros mitos, viene a nuestras ciencias sociales. Está allí en nuestros ritos y nuestras prácticas, es nuestra relación con el cuerpo del colectivo, por medio de la voz. La relación conflictual entre los dos dominios, entre los sacerdotes que son sacerdotes y lo dicen, y los científicos que son sacerdotes todavía, pero que no quiere que se lo diga, esa relación conflictual tiene una consecuencia usual. Todo ocurre como si el conflicto ocultase la relación, como si el conflicto no tuviese allí más que para ocultar la relación verdadera. El conflicto no es más que una apariencia. Yo vuelvo por el camino seguido por el sufragio, a los fundamentos. El sufragio me conduce a la antropología fundamental, aquí contada por la historia de las religiones. (107)


Sujeto


El sujeto yace bajo fragmentos esparcidos, piedras que fueron carne o miembros, echadas por una muchedumbre esparcida, bajo los tropeles formidables del ruido y de los clamores esparcidos, llamados y voces que fueron piedras. Es la transubstanciación. Si la substancia es la piedra, el sujeto debajo la sufragio es el rey. (108). El rey se hace matando. A rey muerto, rey puesto.


Lugar


Cada lugar es un intercambiador, un convertidor, como un transformador. Cualquiera que esté sentado sobre el trono, allí no hay nadie, aquel está entero, está en pedazos menudos, es rey, es rey, es dios, está ausente, cambia. Hace negro, hace noche, la luz está allí, tranquila y serena. Tempestad, buen tiempo. ¿Cómo prever el estallido del rayo? La corona, densa, se dirige hacia adelante: los padres todos asomados, mezclados, despedazan a Rómulo, de diría que hacen como la tortura, codo a codo, Juntos, todas las cabezas en el pozo negro, sobre la cosa innoble que pronto no tendrá nombre en ninguna lengua; la corona se deshace, cada uno oculta y lleva consigo, en el negro seno, un pedazo terrífico de rey, la corona se rehace, algunos han lanzado un grito, nunca oración, después el silencio blanco, agobiante, mudo. ¡Oh Romulo! Pronto, todos van a seguirle, fragor, aclamación.  La muchedumbre huye en torno, se encuentra, entrechoca, parte por miedo y vuelve arrebatada. La muchedumbre es difusa, es turba, es turbulencia, va y viene, desorden y orden. (79)


Espacio


Si alguien define con precisión un espacio, él traza los bordes. He aquí el cordón dibujado por Alba la Larga, y Roma Roma está circunscrita. Quien se encuentra dentro es amigo, y cualquiera que esté afuera es enemigo, tal es el derecho de la guerra, distinto, preciso, bien definido. El primero que, que habiendo cerrado un terreno, se precipita a decir: esto es mío, mató de primero a quien franquea la cerca. Mató de primero quién arrancó los estacones o llenó la fosa. De allí los crímenes, las guerras, los asesinatos, las miserias y los horrores. Si tú estás afuera y penetras, tú eres hombre muerto. Si tú estás adentro y sales, eres hombre muerto. Así ocurrió con Remo, el hermano; así ocurrió con Cluilius, el padre, fueron sometidos a esta precisión, a esta decisión. (121s)


Imperio


Imperium, el imperio. 


Lo impar, el rey que muere y el reino que queda. El imperio es la parte, el imperium, la pars, el despedazamiento, terrible y oculto. El imperio es la parte negada. Fragmentos, dispersión, pedazos, huída de la muchedumbre, estallido. El imperio es lo múltiple, no se rehace a Rómulo a partir de sus miembros descuartizados. El imperio no está en ninguna parte. El niega lo local, el es universal. (82) Cada súbdito asesinado es la parte del rey. Cada uno es hijo del rey, cada uno está dispuesto a asesinar. La matanza funda y sostiene a los reinos.


Mas que sus raíces clásicas de preparar, separar, obedecer, lo que se adquiere o cede.


Link en mi blog sobre Roma titulado Grandes civilizaciones


http://colombiakritica.blogspot.com/2022/11/la-civilizacion-mundial.html?m=1


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